La albahaca es una planta fácil de cultivar y es muy utilizada en el mundo culinario, por lo que sembrarla en casa es de gran beneficio, además su olor contribuye a mantener alejadas a las moscas y mosquitos.
Esta planta, originaria de Pakistan, India e Iran que ahora hace parte casi todo el mundo, es cultivada principalmente en primavera y tiene un ciclo de vida de 1 año, es decir, se debe plantar anualmente, pero tranquilos es muy fácil de sembrar solo hay que mantenerla regada y en constante exposición al sol para garantizar su buen desarrollo.
Índice
Cómo plantar albahaca en macetas
Se recomienda realizar este cultivo a finales de la primavera o al culminar la temporada de invierno, ya que no soporta temperaturas muy frías, es una planta que germina con rapidez y muy fácil de plantar.
Requiere de mucho sol para su buen desarrollo por lo que se debe colocar al aire libre, ya sea una ventana, el balcón o tu jardín, además de una tierra nutrida y con buen drenaje ya que la albahaca necesita un suelo húmedo pero no en excesos.
Ahora paso a paso les mostraremos como plantar la albahaca en macetas:
- Lo principal es conseguir macetas de unos 12 cm ya que la albahaca no necesita de mucho espacio para germinar, además se le deben de abrir agujeros al fondo de la maceta para tener un mejor drenaje.
- Luego prepare tierra fértil al mezclarla con compost o fertilizantes orgánicos, para tener una tierra bien nutrida.
- Vierta esta tierra la maceta y realice pequeños agujeros de unos 1 o 2 cm de profundidad, en los cuales debe añadir de 2 a 3 semillas.
- Riegue de preferencia con una regadera y de forma moderada siempre por la mañana (a diario), para que asi el excedente de agua pueda evaporarse a lo largo del dia, manteniendo siempre el suelo húmedo y coloque la maceta en lugares como las ventanas o el balcón para que tengan una constante exposición al sol.
- En caso de querer sembrar albahaca en mas de una maceta, asegúrese de separarlas por lo menos 15 cm entre si. Algunos prefieren colocar mas de una en macetas grandes, yo aconsejo utilizar macetas pequeñas pero una semilla por cada una para darles mas espacio y no terminar rompiendo alguna al querer cosecharlas.
Consejos en el cultivo de albahaca
Al igual que las demás plantas la albahaca necesita cuidados para su buen desarrollo y para poder disfrutar de ella, unos consejos a seguir en el cultivo de esta planta son los siguientes:
- Una vez la planta germine debe añadir compost 1 o 2 veces al mes.
- Mantener la planta húmeda pero sin charcos y protegida del frio.
- Riegue el tallo directamente y no las hojas.
- Debe podarla 1 vez cada 2 semanas.
- Debe mantenerla limpia de las hiervas malas que pueden crecer a su alrededor.
- Mantenga en contacto con la luz solar.
- Como la albahaca mantiene a raya a los mosquitos y las moscas, su principal riesgo son las babosas, utilice solo artículos ecológicos que no contaminan la planta y mantienen alejado a los caracoles.
- Retire las flores para que las hojas crezcan más fuertes.
Beneficios de cultivar albahaca
A pesar de ser muy utilizada en la cocina la albahaca es muy saludable y aporta grandes beneficios, estos pueden ser:
- Es un sedante natural que puede ayudarte a conciliar un mejor sueño.
- Ayuda con los problemas digestivos.
- Es antiinflamatoria y analgésica por lo que ayuda a calmar los dolores.
- Gracias a las propiedades antisépticas, se recomienda utilizar en estados de gripe.
- Protege a los demás cultivos, manteniendo a las moscas y mosquito alejados, lo que previene enfermedades.
- Limpia las malas hiervas y despunta los tallos. El despunte es quitar los tallos que esten mas arriba para asi provocar que salgan mas tallos y la planta vaya florenciendo mucho mas.
- Debemos quitar los capullos florales que salen al final de los tallos para atrasar su ciclo de fallecimiento (su ciclo de vida termina cuando ya ha florecido, si quitamos estos capullo tardara mas en morir).
Como cosechar albahaca
Se recomienda cosechar la albahaca antes de la floración para aprovechar al máximo sus propiedades y beneficios, solo debemos de cortar las hojas más grandes cuando queramos usarlas, aunque también podemos recolectarlas y guardarlas en el congelador, ya que es la forma más fácil de conservarla
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